Los deportistas, especialmente de alto rendimiento, suelen enfrentar diversas lesiones cutáneas debidas a las condiciones de la actividad física. Factores como la sudoración intensa, la humedad persistente, la fricción de la ropa o equipamiento, y el contacto físico cercano favorecen la aparición de dermatosis​

A continuación, presentamos las principales dermatosis en atletas, sus manifestaciones típicas y recomendaciones preventivas.

Shoe of runner in the mountains training on meadow

Tiña corporis (tiña del gladiador)

La tiña corporis es una infección fúngica superficial de la piel.

Se transmite por contacto piel con piel o a través de fómites (toallas, equipamiento deportivo contaminado).

Clínicamente se caracteriza por parches o placas circulares u ovaladas de borde activo rojo y escamoso, con aclaramiento central, que suelen causar picor.

Se recomienda el aseo diario, secar bien la piel tras el ejercicio, usar ropa transpirable, desinfectar con regularidad las colchonetas y no compartir toallas ni prendas deportivas​, para prevenir su aparición.

Pie de atleta (tiña pedis)

 La tiña del pie, conocida clásicamente como pie de atleta, es la infección fúngica más frecuente en deportistas​.

El calor y la humedad atrapados por calcetines y calzado deportivos crean el ambiente ideal para su desarrollo, especialmente entre los dedos. Las duchas y vestuarios comunitarios son una fuente importante de contagio, al permitir el contacto de los pies descalzos con superficies contaminadas​.

 Se manifiesta por piel macerada, blanquecina y húmeda entre los dedos, fisuras dolorosas o descamación en planta y bordes del pie, o vesículas pruriginosas en el arco plantar. Suele acompañarse de mal olor cuando coexiste con una infección bacteriana.

Como prevención, se recomienda usar calcetines limpios y absorbentes que mantengan el pie seco, cambiar el calzado diariamente para permitir que se airee, secar meticulosamente los espacios entre los dedos tras ducharse y utilizar chanclas en duchas y piscinas públicas.

Foliculitis

La foliculitis es la inflamación e infección superficial de los folículos pilosos, generalmente causada por bacterias.

En deportistas puede presentarse en zonas de roce u oclusión (por ejemplo, en muslos por la ropa ajustada en ciclismo o debajo de los protectores deportivos) y tras procedimientos de depilación o rasurado frecuente (nadadores, ciclistas) que facilitan la entrada de bacterias.

Clínicamente se observa como múltiples pápulas y pústulas pequeñas centradas en un pelo, a veces con una base rojiza. Puede picar o doler levemente, y en casos leves puede parecer “granitos” dispersos.

Mantener la piel limpia, ducharse inmediatamente tras la actividad física y lavar la ropa deportiva tras cada uso puede reducir el riesgo de aparición.

Acné mecánico

El acné mecánico, también llamado acné de fricción, es una variante de acné que sufren algunos atletas por la combinación de sudor, calor, presión y roce constante sobre la piel.​

Las áreas afectadas dependen del deporte y el equipamiento: por ejemplo, en ciclistas pueden presentarse en la región glútea y muslos por el contacto con el sillín; en patinadores, en los hombros y espalda por las protecciones, etc.

Clínicamente se manifiesta con pápulas y pústulas rojizas en las zonas de presión u oclusión, a veces con comedones.

Como medidas preventivas, se recomienda usar ropa deportiva de materiales transpirables que absorban el sudor, colocar barreras o acolchados donde el equipamiento roce la piel, y ducharse inmediatamente después de entrenar.

A diferencia de otros tipos de acné, en el acné mecánico suele bastar con eliminar el estímulo mecánico (ej. aflojar un poco las correas, usar protecciones con forro acolchado).

Dermatitis por contacto

Los atletas pueden desarrollar dermatitis de contacto por sustancias que tocan su piel durante la práctica deportiva. Existen dos tipos: irritativa (por sudor, fricción o químicos irritantes) y alérgica (reacción inmunológica a un alérgeno). La dermatitis irritativa es más común en nadadores debido al cloro de la piscina, que reseca e irrita la piel, o en corredores por el roce constante de la ropa.

Por otro lado, la dermatitis de contacto alérgica ocurre ante alérgenos presentes en equipamientos o productos usados por el deportista​.

Entre los culpables frecuentes se encuentran: componentes del caucho y adhesivos en zapatillas o espinilleras, colas y resinas en guantes o balones, metales como el níquel en hebillas, el látex de gorros de natación, gafas de natación o tapones para oídos, tintes y cromatos en telas deportivas, e incluso ingredientes de cremas analgésicas tópicas (salicilatos, antiinflamatorios) o desinfectantes de uso cutáneo.

Este tipo de dermatitis suele manifestarse 24-48 horas después de la exposición, con enrojecimiento, edema, vesículas o ampollas en la zona de contacto, acompañado de picor intenso. Se sospecha por la distribución de la lesión que corresponde al área de contacto con el agente (ej. patrón de gafas, cinta adhesiva, etc.).

Como medidas generales, se aconseja limpiar el sudor de la piel tras el ejercicio, ya que el sudor en sí puede empeorar tanto la dermatitis irritativa como la alérgica al facilitar la penetración de sustancias. También es útil utilizar barreras (por ejemplo, ropa debajo del equipamiento deportivo para evitar el contacto directo con la piel) y mantener la piel humectada para reforzar la barrera cutánea. En nadadores con sequedad por el cloro, se recomienda duchas cortas con agua tibia, jabones suaves y aplicar cremas emolientes después de nadar​.

Molusco contagioso

El molusco contagioso es una infección viral cutánea que produce pequeñas pápulas rosadas con umbilicación central (una depresión en el centro).

En deportistas se observa sobre todo en quienes practican deportes de contacto físico (lucha libre, artes marciales, rugby) y en nadadores​.

El virus se transmite por contacto directo piel con piel o a través del agua compartida (se ha implicado la piscina en la diseminación, aunque la evidencia no es concluyente).​

Las lesiones suelen aparecer agrupadas o lineales, por lo general son asintomáticas.

La prevención pasa por evitar compartir equipamiento que entre en contacto con la piel desnuda y mantener una buena higiene; en natación, aunque el virus no prolifera en el agua clorada, es prudente cubrir las verrugas mientras persistan.

Verrugas plantares

Las verrugas plantares son lesiones causadas por el virus del papiloma humano (VPH), que ocurren en las plantas de los pies.

Los atletas que entrenan descalzos o comparten duchas sin protección en los pies presentan mayor riesgo de contraerlas​. Es común en nadadores (por transitar descalzos en piscinas), gimnastas, bailarines y practicantes de artes marciales en tatami (judo, karate, etc.)​

Se manifiestan como pápulas duras, ásperas, frecuentemente aplanadas por la presión, con pequeños puntos negros en su interior. Pueden ser dolorosas al caminar o correr cuando se ubican en puntos de apoyo.

En términos de prevención, el uso de sandalias en vestuarios y duchas es fundamental, así como el aseo de los pies.

Forunculosis (infecciones por estafilococo)

Los forúnculos son infecciones más profundas del folículo piloso, que provocan abscesos o nódulos dolorosos llenos de pus.

Los factores de riesgo incluyen compartir vestuarios y duchas.

Clínicamente, el forúnculo inicia como un bulto rojo y sensible que aumenta de tamaño, con una punta amarillenta de pus; puede haber fiebre baja si son múltiples.

La prevención incluye las mismas medidas generales de higiene: lavar ropa y toallas con frecuencia, limpiar con antiséptico las zonas de rasurado, y no compartir artículos personales que toquen la piel (maquinillas, jabones, toallas).

Estrategias preventivas y recomendaciones generales

Una correcta higiene y cuidado de la piel es la piedra angular para prevenir dermatosis en deportistas. A continuación se resumen consejos prácticos aplicables a distintas disciplinas:

Los pies, en particular, deben secarse entre los dedos para evitar el pie de atleta. Si no es posible ducharse de inmediato (por ejemplo, durante un torneo con varios eventos), al menos quitarse la ropa sudada y mantener la piel ventilada hasta la higiene.


Del mismo modo, se recomienda limpiar después de cada uso los implementos que estén en contacto directo con la piel (ej. colchonetas de yoga, guantes de artes marciales, cascos); muchos gérmenes pueden sobrevivir en estos fómites.

Referencias:

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